Myanmar

Myanmar (antigua Birmania) es la imagen de sus pagodas doradas. Allí los monjes budistas son adorados, es una nación rural de grandes valores tradicionales.

Hace apenas 3 años que cuenta con un gobierno elegido democraticamente, lo que ha supuesto el ascenso económico, social y cultural de Myanmar. Grandes inversores han puesto sus puntos de mira en este país, donde han surgido, gracias a la democracia, nuevas formas de vivir. La modernidad convive con lo tradicional y el viajero tiene la sensación de estar en un país con pasión por el avance.

El Lago Ingle es lugar de peregrinación de aquellos que quieren tener una experiencia de comunión con la naturaleza y con lo más profundo del ser. Un sitio apacible donde meditar.

Los más de 3000 templos de Bagán siguen siendo un espectáculo para los sentidos a pesar del terremoto de 2016. La restauración y rehabilitación se ha conseguido y uno no puede dejar de visitar este mágico lugar

Yangón regala al viajero la contemplación del monumento religioso del sudeste asiático: Swedagon Paya. Una construcción dorada colosal que sirve de peregrinaje religioso, pero también de lugar de celebración de ritos como la adivinación o las ceremonias de ordenación.

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